Esta es una receta que siempre hago en Navidad. Quizá sea porque no me gusta el pavo, y me parece más divertido comer perdices, como en el cuento.
Ingredientes
- 4 Perdices
- 4 ó 5 Cebollas
- 4 Zanahorias
- 1 vaso de Vino blanco
- 1 chupito de Vinagra de vino
- 1 Vaso de Caldo
- 1 Vaso de Jerez
- 2 onzas de Chocolate negro
Preparación
- Cuento con que le hemos advertido a nuestro pollero, que las queremos desplumadas y limpias. Las cortamos por la mitad.
- En una cacerola grande, las freímos para sellarlas. Apartamos cuando estén doradas y salpimentamos.
- Picamos las cebollas y las pochamos en ese aceite (cinco o seis cucharadas de aceite). Tiene que haber mucha cebolla. Si nos parece que hay demasiada, todavía ponemos una más. La perdiz es muy seca y necesita mucha salsa.
- Pelamos las zanahorias, las cortamos en rodajas e incorporamos.
- Añadimos a todo esto las perdices, el caldo y el vinagre. En 40 minutos debería estar hecho. Las perdices son muy irregulares. Si nos las han colado un poco duras y no terminan de hacerse, las metemos con un poco de caldo en una olla a presión hasta que estén (unos 10/15 minutos).
- Apartamos las perdices y pasamos la salsa por una trituradora.
- Añadimos el Jerez y el chocolate negro, una vez rayado a la salsa.
- Mezclamos todo junto con las perdices unos 5 ó 10 minutos
Trucos e ideas
- Y dado que estamos en Navidad, nos podemos esmerar con el acompañamiento. Puré de patata, de castañas, chalotas, ensalada de granada, champiñones…