Pedro lleva toda una vida dedicado a la restauración. Desde Villatobas (Toledo), pasando por Príncipe de Viana, Viridiana, Barlovento, La Aldaba… hasta montar su primer restaurante, El Rinconcito de Serrano, llamado así por los 32 m2 que ocupaba. Ahí, debido a su buen hacer, y tras once años, abrió La Taberna de Pedro en Alberto Alcocer y acaba de trasladarse a la calle Montalbán 3, puerta con puerta con La Vinoteca de Luis García de la Navarra, su hermano. Por cierto, uno de los mejores sumilleres del país.
La especialidad de ambos restaurantes son las verduras: cardo, borrajas, tirabeques, menestra, guisantes, alcachofas… siempre, como dice Pedro, siguiendo lo que le piden sus clientes.
Nos ha permitido saborear unas deliciosas borrajas acompañadas con un delicioso verdejo de Rueda, de La Finca Las Caraballas. El vino del mismo nombre, se une a la tendencia de los vinos ecológicos.
Ingredientes (para cuatro personas)
- 500 gr. de Borrajas
- 1 Ajo
- 3 Patatas
- Aceite virgen
Preparación
- Lo más pesado es limpiar las borrajas. Hay que hacerlo con guantes porque tienen unos pequeños pelitos que pinchan un poco y además manchan. Es fácil aunque pesado. Se van partiendo en trozos de unos cuatro dedos por la parte del tallo, y estirando irán saliendo unas hebras más gruesas que son las que queremos quitar. Las hojas se tiran.
- Preparamos dos cazuelas con abundante agua. Una la pondremos a hervir. La otra con agua muy fría, incluyendo hielo.
- Cuando rompe a hervir, ponemos las borrajas unos cuatro minutos. Las sacamos, e inmediatamente las metemos en el agua fría, para cortar el hervor y que resalte todo su color.
- Por otro lado, cocemos las patatas cortadas en trozos grandes con agua hirviendo durante 15 ó 20 minutos.
- Ponemos el ajo muy picadito en una sartén con cuatro o cinco cucharadas de aceite y salteamos, tanto las borrajas como la patata.
- Por último, y ya en el plato, le echamos un chorrito de aceite virgen.
Trucos e ideas
- Lo mas importante es que la borraja sea muy fresca.
- Podemos ponerle jamón o cualquier otra cosa que la adorne, pero a mí me gusta como la hace Pedro, sola, con un sofrito de ajito.
